Un tema que inquieta a los músicos es cómo viajar con instrumentos musicales en avión. Recibimos muchas consultas sobre este tema porque hay mucha confusión al respecto. Nuestra experiencia con siniestros de instrumentos durante vuelos es lamentablemente muy vasta y queremos ayudarte a que tu instrumento llegue sano y salvo a destino. Así que, ya que estamos en época de viajar, te explicamos cómo proceder en caso de que estés planeando viajar en avión con instrumentos musicales.
-Asegura tu instrumento antes de viajar
Esto es recomendable, en especial con instrumentos valiosos, ya que en caso de daño podrás recuperar el coste total del instrumento o el coste de su reparación. Dependiendo de tu destino podrás elegir el ámbito de cobertura, que en el caso de nuestro seguro Penta es España, Europa o Mundial. Si ya lo tienes asegurado con ámbito España, puedes hacer una extensión europea o mundial por el tiempo que dure tu viaje.
-Elige bien la compañía aérea
Antes que nada, debes leer las condiciones de cada compañía sobre transportar instrumentos. Cada una tiene sus propias reglas, así que es importante conocer sus requisitos antes de comprar el billete.
-Decide cómo llevarás tu instrumento
Los aviones ofrecen 4 maneras de transportar instrumentos musicales, aunque sólo recomendamos 3 de ellas. Todo dependerá del tamaño del instrumento o de los medios económicos disponibles, entre otros factores. Comencemos con la opción que NO recomendamos:
1 –En bodega de equipaje común: NUNCA, recuerda, NUNCA despaches tu instrumento a la bodega de equipaje común. La siniestralidad en estos casos es muy alta. Si alguna vez has visto cómo se trata a las maletas una vez que dejan tus manos, sabes lo que decimos. Y no sólo nos referimos aquí a los golpes, caídas y demás daños derivados de su manipulación, sino a los cambios atmosféricos, de humedad y de presión. La temperatura en la pista puede ser muy elevada y en unos minutos pasar a bajo cero en las bodegas comunes, que no están calefaccionadas ni presurizadas. Esto es fatal para los instrumentos, especialmente los de madera. Y además, adivina qué? El seguro no cubre los daños de los instrumentos despachados en bodega común. Por eso, si esta es la única opción que te ofrece la compañía, busca otra compañía. Si no tienes otra compañía, infórmate sobre la posibilidad de alquilar un instrumento en destino en lugar de llevar el tuyo. Sí, así de peligroso es enviar el instrumento a bodega común!
2 –Como equipaje de mano: Esta opción es para instrumentos pequeños, aunque la medida y pesos máximos permitidos varían según la empresa. Iberia es una de las más permisivas, aceptando instrumentos (estuche incluido) que lleguen a 30x120x38 cm, lo cual permite una cierta variedad. Por supuesto, el estuche debe ser rígido. Una vez en la cabina y según su tamaño, puedes optar por ponerlo debajo del asiento delantero (aunque es un espacio muy pequeño, suele tener 40x30x20 cm) o en los compartimientos superiores, controlando muy bien que nadie lo manipule ni le ponga cosas encima. En general, se acepta sólo una pieza de mano por persona, por lo que si llevas tu instrumento no podrás llevar otra.
3 –En un asiento: Está la opción de comprar un asiento para nuestro instrumento. Si te lo puedes permitir, es una decisión segura porque podrás tenerlo controlado en todo momento. Los tamaños admitidos dependen de la compañía aérea: la idea general es que el instrumento quede bien sujeto al asiento mediante el cinturón de seguridad y que no sobresalga demasiado por encima del apoyacabezas.
4 –En bodega de equipaje especial: Es la bodega donde viajan animales, plantas y equipajes delicados. Está debidamente presurizada y a la temperatura de la cabina. Esta es la opción adecuada para un instrumento grande. Aquí no debería tener daños por presión ni temperatura. Pero aún nos quedan los daños de manipulación, por eso debes protegerlo poniéndolo en una flight case (en inglés, “caja de vuelo”), que son embalajes especiales para transporte aéreo, rígidos, resistentes y donde el instrumento está protegido mediante sujeciones y acolchados interiores. Sin estas cajas y solo con el estuche tradicional -aunque sea rígido- es probable que el instrumento llegue dañado. Los estuches rígidos se deforman o rompen con los golpes, recuerda que un estuche rígido no es una flight case. Asimismo, las flight cases deben ir sujetas dentro de la bodega para evitar desplazamientos bruscos, por eso es recomendable que informes a la compañía aérea que es una pieza delicada y valiosa para que sepan cómo evitar riesgos, tanto acomodando la pieza en la bodega como evitando dejarla expuesta al calor en las pistas de vuelo, entre otras circunstancias que deberían cuidar.
-Llega temprano al aeropuerto
Aunque llegues al día del vuelo con todo perfectamente planificado, es mejor llegar muy temprano al aeropuerto por si surge algún contratiempo o algún empleado necesita una explicación extra sobre nuestro equipaje.
-Conserva la documentación
Guarda los comprobantes de compra de tu billete y/o tarjetas de embarque, ya que en caso de daño del instrumento, los necesitarás para cualquier reclamación.
Tomando todas estas precauciones, tu instrumento debería llegar bien. Si tienes el instrumento asegurado con nosotros y sufre un daño en el viaje, llámanos para informarnos y te guiaremos en los pasos a seguir para que todo concluya satisfactoriamente. Si deseas contratar tu seguro de instrumentos, entra en nuestro tarificador para conocer el coste y contratarlo o comunícate con nosotros.
¡Feliz viaje!
